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Santo Domingo.- El cónsul de Haití en Santiago, James Jaques, criticó este sábado la actuación de las autoridades migratorias al intervenir la pasada noche en un establecimiento de ocio, donde se detuvo a 21 ciudadanos haitianos y se incautaron de 15 pasaportes en poder de un hombre de esa nacionalidad.
A su entender, "no es normal que los agentes de migración vayan a una empresa para detener haitianos" con estatus migratorio legal e, incluso a un ciudadano dominicano, dijo en una rueda de prensa junto a los propietarios del local donde se desarrolló la acción, el bar restaurante y discoteca Laromate Creole.
Asimismo, aclaró que en ningún caso fue detenido durante el operativo, tal y como coincidió en señalar la Dirección General de Migración (DGM) en un comunicado.
El empresario Karl Saintoiry mostró a la presa sus documentos identificativos y los de su socio dominicano, Johnathan Solano, dejando claro que no son "ilegales" y exigiendo explicaciones por la actuación que llevaron a cabo agentes policiales y migratorios.
Asimismo, explicó que lleva ocho años viviendo en República Dominicana, donde ha hecho una inversión en su negocio que "ya está cerrado después de lo sucedido anoche, porque ningún cliente va a querer entrar porque sea legal o ilegal se lo llevan".
"Los empleados están asustados, porque a algunos se los llevaron incluso con carta de trabajo", indicó Saintoiry.
Denunció, además, que incluso el cónsul, "el primer hombre que nos representa en la ciudad fue golpeado" en el operativo, y que su socio sufrió "humillación y maltrato físico y mental" por parte de los agentes.
El mismo Solano denunció que violaron sus derechos y relató que cuando lo subieron al camión de migración lo trataron "como una basura", sin dar validez a su pasaporte y a su cédula y exigiendo su partida de nacimiento como documento acreditativo de su estatus regular, algo que, a su entender, "no tiene sentido".
La DGM informó sobre el operativo de la pasada noche en un comunicado que señala que sus agentes, junto a agentes de la Policía y la Dirección de Control de Bebidas Alcohólicas (COBA) desmantelaron una banda que traficaba con pasaportes haitianos y visas.
En la operación fueron detenidos 21 haitianos indocumentados y se incautaron de 15 pasaportes en poder de un hombre de esa nacionalidad, según la nota de la institución, que asegura haber actuado en el marco del reglamento y la ley de migración, respetando los protocolos de los derechos humanos.
