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Washington.— El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, recibió este lunes en la Casa Blanca a los Dodgers de Los Ángeles, campeones de la Serie Mundial 2024, en una ceremonia cargada de elogios, anécdotas y espíritu deportivo.
Trump, actualmente en su segundo mandato presidencial, rindió homenaje al conjunto angelino por su esfuerzo y determinación en la conquista del título de las Grandes Ligas, el octavo en la historia de la franquicia y el segundo desde 2020, tras vencer 4-1 a los Yankees de Nueva York.
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“Estoy emocionado de darles la bienvenida a la Casa Blanca, un grupo verdaderamente talentoso: los campeones de la Serie Mundial 2024, los Dodgers de Los Ángeles”, expresó el mandatario al iniciar su intervención ante jugadores, cuerpo técnico y directivos del equipo.
El evento contó con la participación de destacadas figuras del equipo, incluyendo al lanzador estelar Clayton Kershaw, quien entregó al presidente una camiseta con el número 47 —en referencia a un posible regreso presidencial en 2029—, así como al fenómeno japonés Shohei Ohtani, de quien Trump bromeó diciendo: “Parece una estrella de cine… rompió todos los récords y se convirtió en el primer miembro del club 50-50. Shohei logró lo que muchos llaman “el mejor juego de la historia”.
También estuvo presente Mookie Betts, quien en 2019 había rechazado una invitación similar cuando fue campeón con los Medias Rojas de Boston. “No quiero decir que lo miraba cuando estaba en Boston, pero lo hice”, dijo Trump. “No pensé que fue un buen intercambio cuando lo hicieron, y estaba en lo cierto”.
El propietario del equipo, Mark Walter, también subió al escenario para agradecer el recibimiento y reafirmar la importancia de mantener viva la tradición de los campeones visitando la sede presidencial.
Tras la ceremonia y una breve visita a la Oficina Oval, los Dodgers se dirigieron al Nationals Park, donde esta noche iniciarán una serie de tres partidos ante los Nacionales de Washington.
