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MADRID .— El Real Madrid presentó este lunes una queja formal ante la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y la máxima autoridad deportiva del país por lo que consideró una “actuación escandalosa” del arbitraje y del VAR durante su derrota 1-0 frente al Espanyol el pasado sábado en La Liga.
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En una carta de cuatro páginas enviada tras la reunión de su junta directiva, el club blanco expresó su descontento con varias decisiones arbitrales que, según ellos, influyeron directamente en el resultado del encuentro. La derrota permitió al Atlético de Madrid acercarse a un punto del líder Madrid, justo antes del esperado derbi que se disputará el próximo sábado en el Estadio Santiago Bernabéu.
El Madrid centró sus quejas en una dura falta cometida sobre Kylian Mbappé por el defensor del Espanyol, Carlos Romero, al minuto 60. El árbitro mostró tarjeta amarilla a Romero, una decisión que fue ratificada tras la revisión del VAR, pero que el club merengue calificó como insuficiente, alegando que debió haberse sancionado con una tarjeta roja directa. Para aumentar la controversia, Romero fue quien anotó el gol de la victoria para el Espanyol al minuto 85.
Además, el club criticó la anulación de un gol de Vinicius Júnior en el minuto 21, que fue invalidado tras determinarse, mediante revisión de VAR, que Mbappé había cometido una falta en la jugada previa. El Madrid calificó este tanto como “absolutamente legal” y exigió la divulgación de las conversaciones de audio del VAR relacionadas con las jugadas polémicas.
“El escándalo generado por este partido ha tenido una vez más repercusión mundial, con la prensa internacional denunciando el uso sesgado del VAR en España y la falta de credibilidad del arbitraje español”, manifestó el club en su comunicado.
El Real Madrid también denunció que lo sucedido no es un incidente aislado:
“Lo ocurrido no es un episodio aislado ni un mero error arbitral. Es la manifestación más reciente y grosera de un sistema arbitral cuya credibilidad está completamente erosionada, no sólo por la acumulación de decisiones que lo han puesto bajo sospecha, sino por su propia estructura, diseñada para operar sin control efectivo y al margen de cualquier exigencia de imparcialidad”, añadió la entidad blanca.
Esta queja formal es un hecho inusual en el fútbol español, donde si bien los principales clubes suelen quejarse de las decisiones arbitrales, raramente presentan reclamos oficiales de esta magnitud.
Por su parte, el presidente de La Liga, Javier Tebas, respondió a través de la red social X, señalando que existen propuestas para hacer más transparente la estructura arbitral en España, pero apuntó que el Real Madrid fue uno de los clubes que votó en contra de estos cambios y no propuso alternativas.
El derbi madrileño del próximo fin de semana, que podría definir el liderazgo de La Liga, se jugará en medio de esta creciente tensión entre el Real Madrid y las autoridades del fútbol español.
