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San Francisco, California.– El tercera base dominicano Rafael Devers fue recibido con una estruendosa ovación por parte de los fanáticos en el Oracle Park durante su primer turno al bate con los Gigantes de San Francisco, marcando así un debut cargado de emoción y expectativas en su nueva etapa dentro de las Grandes Ligas.
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La multitud, puesta de pie, aplaudió con entusiasmo al ver al dos veces All-Star caminar hacia el plato, vistiendo por primera vez el uniforme negro y naranja. La reacción fue una mezcla de bienvenida y reconocimiento a la trayectoria del jugador nacido en Sánchez, Samaná, quien llegó al conjunto californiano como una de las adquisiciones más importantes de la temporada.
Devers, de 27 años, fue traspasado desde los Medias Rojas de Boston, equipo con el que jugó durante ocho campañas y donde se consolidó como uno de los bateadores más consistentes de la Liga Americana.
“Es una sensación increíble. Estoy agradecido por esta bienvenida y listo para dar lo mejor de mí con esta organización”, expresó Devers tras su bienvenida esta tarde visiblemente emocionado por el recibimiento.
