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OKLAHOMA CITY (AP) — La temporada 2024-2025 de la NBA ya tiene su nombre propio: Shai Gilgeous-Alexander. El canadiense de 26 años no solo condujo a los Oklahoma City Thunder a su primer título desde su traslado a Oklahoma, sino que hizo historia al convertirse en el cuarto jugador en conseguir una hazaña reservada a leyendas: ser MVP de la temporada regular, MVP de las Finales, campeón anotador y campeón de la NBA en la misma campaña.
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Con su actuación estelar en la victoria 103-91 sobre los Indiana Pacers en el Juego 7 de las Finales, Gilgeous-Alexander se unió a un club reservado a íconos como Michael Jordan, Kareem Abdul-Jabbar y Shaquille O’Neal.
“Esto no es solo una victoria para mí. Es para mi familia, mis amigos, mis entrenadores, para todos los que han estado conmigo desde el inicio. Esto es para los fanáticos”, declaró emocionado el nuevo rey del baloncesto.
En una temporada colosal, Shai lideró a los Thunder con 64 juegos de al menos 30 puntos, acumuló 3,172 unidades totales (incluidos playoffs) —la novena cifra más alta en la historia de la NBA— y fue el corazón ofensivo de un equipo que sumó 84 victorias, una de las marcas más altas registradas.
Pese a no tener el estilo explosivo de otras superestrellas, su capacidad para controlar el ritmo del juego, crear espacios y anotar con eficiencia lo ha catapultado a la cima. Su técnico, Mark Daigneault, no escatimó elogios: “Es un anotador increíble y ha mejorado como generador de juego. Es nuestro líder, dentro y fuera de la cancha”.
La lesión de Tyrese Haliburton, base estrella de Indiana, empañó en parte el esperado duelo en la cancha. Pero aún con el trágico incidente en el primer cuarto, Gilgeous-Alexander ya había dejado huella con 29 puntos decisivos y un control absoluto del partido.
Más allá de los números, su impacto trasciende: es la nueva cara del baloncesto en Canadá, el ídolo de toda una generación. El legendario Steve Nash, MVP en dos ocasiones, lo reconoció: “Es un ejemplo brillante para todos, dentro y fuera de la cancha”.
Inspirado por Kobe Bryant, a quien considera su jugador favorito, Gilgeous-Alexander espera acercarse a ese nivel de grandeza:
“Nunca lo conocí, pero su mentalidad me marcó. Espero poder estar algún día en ese mismo nivel”.
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