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Washington.- — Aaron Judge, la estrella de los Yankees de Nueva York, volvió a demostrar por qué es uno de los jugadores más completos del béisbol, al protagonizar una jugada defensiva espectacular y alcanzar un hito importante en su carrera durante la victoria de su equipo 5-2 sobre los Nacionales de Washington el lunes por la noche.
Aunque Judge no conectó jonrones en esta ocasión, dejó su huella en el partido con una actuación defensiva que dejó a todos boquiabiertos. En la cuarta entrada, cuando el venezolano Andrés Chaparro conectó lo que parecía un cuadrangular seguro al jardín central, Judge no solo evitó que la pelota se volara la cerca, sino que también inició un doble play crucial para los Yankees. El batazo de Chaparro, con una velocidad de salida de 99.4 mph y una distancia proyectada de 389 pies, habría sido un jonrón si no fuera por la intervención del cañonero neoyorquino.
Judge, conocido por su imponente presencia en el plato, demostró que su destreza defensiva es igual de impresionante. Con un salto perfecto, engarzó el elevado de Chaparro justo antes de que la pelota cruzara la barda del Nationals Park. No contento con eso, lanzó la pelota con precisión al venezolano Gleyber Torres, quien completó un doble play que cerró la entrada, frustrando las esperanzas de los Nacionales de recortar la ventaja de los Yankees.
Además de su brillante actuación defensiva, Judge también alcanzó un logro significativo en su carrera al conectar el hit número 1,000. Este hito llega en un momento crucial para los Yankees, quienes han ganado cinco de sus últimos seis partidos y ahora lideran la división Este de la Liga Americana, colocándose dos juegos por delante de los Orioles de Baltimore.
